El tenis profesional es un mundo aparte, donde se juegan sustanciosos premios y contratos publicitarios. Para triunfar, no sólo basta con tener talento y una excelente forma física, se necesita además un equipo realmente profesional que cuide en los mínimos detalles la actividad diaria del deportista, incluyendo la planificación de la temporada, entrenamientos, dieta alimenticia, relaciones, etc. Nada se puede dejar al azar, pues de ello dependerá el futuro del jugador. En los años 2001 y 2003 hemos evaluado a dos brillantes jugadores de la ATP, ambos acusados de haber consumido Nandrolona y/o derivados de la misma. Uno de ellos, hoy día retirado, con una brillante carrera a sus espaldas, el otro con un futuro que ya es realidad, alguien que no hace mucho alcanzó el número dos del ranking mundial. En ambos casos las pruebas aportadas por el comité de disciplina deportiva de la ATP Tour dejaban entrever irregularidades, máxime cuando los valores del análisis y contra-análisis eran dispares. No obstante, los jugadores estaban apercibidos de la apertura del correspondiente expediente disciplinario, que concluiría con una vista en un tribunal deportivo donde se tomaría la decisión final. Ante esta situación y en vista de que las graves sanciones que se preveían, hasta 2 años sin jugar, podrían truncar las carreras profesionales de los jugadores, sus respectivos representantes nos encargaron la realización de una Evaluación Psicofisiológica de la credibilidad del testimonio completa, que alcanzaba tanto a los jugadores como a entrenadores y preparadores físicos. Las pruebas fueron dirigidas por Patricia, nuestra Psicóloga Forense y completadas con el polígrafo. En ambos casos el resultado fue que ninguno de ellos se había dopado voluntariamente. A uno de ellos la ATP le absolvió completamente, en el segundo la sanción aplicada fue la mínima, dos meses. Se evitó una injusticia, y al mismo tiempo se pudo demostrar la inocencia de dos sensacionales deportistas.
Polígrafo en el deporte. Casos de Doping